lunes, 26 de septiembre de 2011

Fotogramas

Oscura pupila marrón tierra

marrón verde negra

artificio constante mirar

tus pupilas contorno marrón.

Pestañitas.

Un par de manos con dedos redondos

contornos desnudos de

un manojo de simetrías

ascendiendo

por el balanceo impreciso

de los gestos.

Pensarlo dos veces

tres veces

las veces

que fuera necesario

(decirlo)

o pensarlo en otro idioma

no poder hacer nada al respecto

maldecir la luz del cartel de cerveza

(la publicidad distraía

tu mirada)

y entre la gente

rebotando como si fuera un

pinball

dando giros calculados

(un deboulé

atrás del otro)

atrás

tuyo

chocarme

sin querer

tenerte

por los dedos redondos

(nunca

antes

había

sentido tu

piel)

me callo, me callo (pienso).

Porque imaginaba siempre

las infinitas posibilidades

de tragedia

a las que me tiene acostumbrada

la literatura

hasta que me ví

en una foto

haciendo relevé para llegar a tus hombros

y decidí terminar

con los poemas homéricos:

dar lugar al verso libre

quedarme rimando

balbuceos

apenas un:

¡ah!

sábado, 10 de septiembre de 2011

Por partes

Supieras o no, la vista se desarma

sublime en la mejilla, la manera, la pestaña

quería decirte antes que no estabas

mirando en ninguna parte

para darte cuenta de que en frente tuyo

una mueca se relame.

Prefiero redimirme que alcanzar otro cielo

porque el cielo no es de nadie,

y tu cielo es un consuelo de tontos:


Yo no me conformo con el aire.


Prefiero confundirte con alguien

que pensar en tu mirada

que los ojos se levanten apenas

quando miren

y se olviden al instante la palabra.


Prefiero destruirte la cabeza

que besarte en la boca

o escupirte los hombros

a estrecharte la mano

contra mi cuerpo

que no se altera ni un momento

de verte parado y enfermo.


Entre todas las cosas

qrefiero encontrarte desnudo

por casualidad

desnudo

y que sea necesario imaginarte primero

para encontrarte después

tendido, escupido, besado, aplastado,

destruído, olvidado y nervioso.


Prefiero, de todo lo que el mundo tiene

y de lo que la vida vomita

prefiero tenerte las manos cortadas

guardadas entre mis dendritas

en un cajón de madera

para que no se escapen y resistan.

Cortarte los pies

y dejármelos afuera

esperando los pasos que siguen

porque tus ojos están tristes

y miran adelante,

y no lloran,

y no viven,

y no queman las miradas cuando laten


Los sonidos, en cambio,

nunca marean.


Se oye afuera, una hoguera, y el grito,

y el grito es horas de terror,

al verte de nuevo,

y tener que apreciar

el mundo de nuevo.

No me contiene el espanto

no me llega el abismo

ni siquiera una tortura,

ni un suspiro,

ni un ahogo

ni un alivio.


No me lleva la muerte,

Ni me lleva el silencio,

por mí sólo espero

y que te quedes adentro

encerrado sin manos, sin pies, sin ojos,

¡Que te quedes pegado

A mi piel de cerrojo!

¡Que te hagas a un lado de todo

y no vuelvas nunca a encontrarme en la calle!

¡Ni en ningún lado!


Prefiero tu piel de látex.

clavándome en los poros la vista

llevándome la saliva entre las pestes,

que se arrolla en litros

formando un hilito

en un camino

de dientes

-----------------Que vuelve a tragarse y digerirse,


y al oírme,


regurgitarse,


morirse


y vencerse.