lunes, 6 de agosto de 2012

Tres igual a cero


Nunca le pusimos una medida
al tiempo
pero
tres meses se pasaron volando
y ahora los otros tres restantes,
los que pasaron
desde el cero del adiós
en vez de contar en positivo
para adelante,
me estiran el calendario
que unió sus puntas
formando un círculo
desde donde vuelvo a empezar: 
tres da igual a cero.
Se pasa rápido el tiempo, in praesentia,
y con la ausencia, claro, a mí se me hizo un barro

que quizás al segundo día ya lo naturalizaste
y dejaste de contar.

Me dirás
“lo racionalizaste”,

y entonces dejé de escribir.

4 comentarios:

A girl called María dijo...

¿qué hacemos si Quappi deja de escribir? :(
El tiempo ¿mesurable o no? ¿desde dónde se empieza a contar? Me pregunto constantemente eso y enloquezco. El tiempo como medida que atenúa el dolor, el tiempo como distancia que habilita el análisis, etc. El tiempo que nos permite decir "fuaaa, ¿ya tanto?"

Quappi dijo...

Nos viene tan mal hacernos esa pregunta, Mery. Let it be, no?
A mí me matan las fechas, los calendarios, los domingos y tener una memoria caprichosa.

Vlad dijo...

"Voté" sonrisa, pero porque me sacaste una en serio...

Mercurio dijo...

Muy lindo. Si. A veces pasa rápido el tiempo, hay que aprovechar el día a día.
No hay que racionalizar demasiado las cosas, ni dejar que los miedos nos impidan conocer cosas insoportables pero quizás interesantes.
;)
De paso te comparto un texto http://egodemercurio.blogspot.com.ar/2011/08/juan-el-b-autista_27.html