domingo, 19 de mayo de 2013
La del Escandinavo
¿Nunca te hicieron la del Escandinavo?
Yo fui un par de veces, un par y nunca más.
Hace mil que no voy, lo extraño -me dijo María
y yo le dije que también, porque
la última vez que fui al Escandi, ni entré.
Es que enfrente hay un telo muy conveniente
al que tampoco entré.
Pero pongámonos serios,
¿quién no tiene una excusa bajo la manga
cuando se trata de un levante?
Quiero tener una excusa tan buena como el Escandinavo
y decirte que te bajes del colectivo conmigo la próxima vez.
Basta con asomarme en tu hombro
y que lo notes con la fuerza de una ráfaga de lluvia,
como si fuera una inundación que está por salirnos de los cuerpos,
cuerpo voz que se afloja en las manos nerviosas sobre los muslos tiesos,
pensar en las palabras que voy agotando
y las excusas cada vez se vuelven más pocas.
Si vuelvo a rozarte el hombro, si querés tocarme el pelo,
yo te voy a decir que te bajes conmigo,
y después vemos.
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1 comentario:
uffffffffffff, haceme la del Escadinavo mamiiii jajaja
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